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Pensamientos y temas de ayuda resumidos para una lectura rápida
Escucha a tu hija o hijo, aunque diga incoherencias.
A veces escuchamos que los niños pequeños dicen cosas sin sentido, tontas o simple y sencillamente que sabemos que son mentira y que lo dicen para impresionar. Lo curioso no es tanto eso, sino, ver las reacciones de las personas adultas; algunas reaccionan con malestar, otras con una risa casi burlona, otras con interés y otras con indiferencia. detrás de
Supera esta idea difícil.
Existe una idea irracional que normalmente tienen las personas y que les cuesta comprender. La idea es: “El hecho de que yo quiera a alguien, no obliga a la otra persona a quererme, y si no me quiere, eso no la hace mala gente”. Esta idea es difícil porque desde muy pequeños aprendemos que el amor es todo lo contrario,
No trates de cambiar a tu pareja.
Con una persona no se le hacen cambios, se hacen acuerdos; cuando una persona cambia, es porque lo necesita, no porque alguien más se lo imponga. Es habitual que lleguen a mi consultorio parejas que dicen estar buscando ayuda, pero en realidad lo que sucede es que uno de los dos, trata de cambiar al otro; lo más frecuente es
Autoestima femenina.
El valor que se da una mujer a sí misma tiene mucho que ver con las exigencias que socialmente se le imponen; no importa que tan resistente o indiferente sea a éstas, hay parte de ellas que siempre le tocan el corazón. Aspectos como el color de piel, la figura, el peso, ser madre, ser novia, esposa e hija ejemplar
¿Ser ama de casa es retrógrada?
Actualmente se vende la idea de que una familia donde mamá y papá trabajen es el modelo más moderno y correcto; tanto por un tema de necesidad económica, como por la realización e independencia económica de la mujer. Esto hace que un modelo de familia donde la madre es ama de casa y se dedica al trabajo de administrar el
El castigo físico. “A mí me pegaron y ahora soy buena persona”
Cuando se habla de disciplinar a los hijos e hijas inevitablemente se termina hablando del castigo físico; sea el cincho, el chilillo, la sandalia o la palma de la mano. El castigo físico, aunque socialmente mal visto por unos y desaconsejado por la psicología, sigue siendo uno de los métodos más populares y efectivos para “amansar” a las niñas y