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Los seres humanos nacemos con una cantidad de necesidades que se pueden resumir en la necesidad de alimentación y de afecto. Una de las manifestaciones de la necesidad de afecto es la sensación de seguridad, de protección; de que hay alguien que nos cuida y atiende. Aunque hemos crecido con la idea de que la manifestación de celos es una

Existen parejas que comienzan su relación en los años de la adolescencia, donde las formas de pensar y sentir están dominadas por ciertos ideales de cómo deben ser las cosas; algunos de los cuales muchas personas conservan hasta la adultez. Cuando la relación trasciende a la edad de la juventud, la pareja debe hacer cambios de esos ideales para que

Habitualmente, con algunas excepciones muy puntuales; la salud del estado financiero es un reflejo de la salud emocional. Esto es así porque la forma de administrar el dinero, muchas veces se aprende de forma emocional y no racional; por ejemplo, se nos ha enseñado que el no tener las mejores cosas, es motivo para sentirnos mal. Esto contrasta con algunos

Es común escuchar a parejas discutir por los celos de uno, o de ambos; que se manifiestan a través de medidas de control emocional como el chantaje, llamas reiteradas celular, solicitud de cuentas sobre la administración del tiempo y dinero, y reclamos “preventivos”. Aunque se dice que el sentimiento de celo es normal hasta cierta medida, habitualmente esa medida es

“El machismo mata”, dice una popular frase para concientizar sobre la necesidad de cambiar algunas formas de pensar. Pero, qué sucede cuando el mismo machismo se filtra en el ideario feminista. Examinemos una idea, que es profundamente machista pero que se ha escuchado en la defensa de los derechos de la mujer. La idea es “Los hijos son de la

Las personas enfermamos por diversos motivos, como por virus o bacterias; sin embargo, hay un motivo que es ignorado con frecuencia. El factor psicológico. Las enfermedades psicosomáticas, como se les conoce, no se refiere al hecho que a veces la gente se inventa enfermedades para llamar la atención o evitar las consecuencias de alguna conducta reprochable (aunque eso también pasa).