Cuando Mamá es difícil.

Una de las figuras más importante en el desarrollo afectivo es la de Mamá; ella nos enseña las primeras lecciones de amor. Por este motivo habitualmente se le asocia con adjetivos como la ternura, disciplina, seguridad y gratitud perpetua.

Pero, qué sucede cuando se ha tenido una Mamá difícil, una que es particularmente agresiva, controladora y destructiva; una que no entona con el ideal comercializado durante el mes de Mayo.

La resolución de tal situación pasa por comprender por qué Mamá es como es y aceptarla; en esta etapa se tienen que resolver conflictos entre las ideas de que “a las madres se les perdona y tolera todo”, y aquellas que reproducen resentimientos como “ella es la peor”.

Luego se debe ser una persona independiente de Mamá y de su control, perdonarle, y poner algunas condiciones que se elijan para establecer un límite a la incidencia de Mamá en la propia vida.

 Las publicaciones de este blog están tomados del libro «PAUSA». En él podrás encontrar artículos no publicados en la web.