No trates de cambiar a tu pareja.

Con una persona no se le hacen cambios, se hacen acuerdos; cuando una persona cambia, es porque lo necesita, no porque alguien más se lo imponga.

Es habitual que lleguen a mi consultorio parejas que dicen estar buscando ayuda, pero en realidad lo que sucede es que uno de los dos, trata de cambiar al otro; lo más frecuente es que el hombre lleve a la mujer con un tono de “arréglela, mucho molesta”, y al mismo tiempo, la mujer cede de sobre manera al hombre, lo que en el fondo, es una forma de tratar de cambiarlo. Es decir, llegan tratando de cambiar a la otra persona.

Cuando una pareja inicia una vida junta tienen que afrontar un cambio de reglas de convivencia, algunas son agradables, otras no lo son; ante todo el amor implica siempre donarse. Madurar como pareja es aprender a aceptar al otro tal cual es.

 

Las publicaciones de este blog están tomados del libro «PAUSA». En él podrás encontrar artículos no publicados en la web.